Reconocimiento a Mary Guerrero coordinadora de acción social de la Iglesia Evangélica Cristo Vive

Forma parte de nuestra misión y valores incentivar y promocionar el voluntariado, reconociendo públicamente la labor que hacen nuestras entidades y las personas voluntarias que estas albergan.

El voluntariado es una parte troncal que vertebra toda la acción social de Diaconía Madrid. Nuestras entidades cuentan con un alto número de personas voluntarias implicadas que, sin su inmensa y continuada labor, no sería posible lograr el impacto social que hoy tiene la acción social evangélica en nuestra región.

Desde de la plataforma de acción social Diaconía Madrid, queremos honrar esta labor con la que nos sentimos en deuda. En 2020 hemos dedicado estos reconocimientos a las personas voluntarias que han destacado en la lucha contra la COVID-19. Mary Guerrero ha sido doble ganadora. Por un lado porque mantuvo la atención y redobló esfuerzos y presupuesto. Por otro porque ella misma resultó contagiada por el virus y lo superó.

¡Muchas gracias Mary por tu ejemplo y por la calidez y calidad de vuestra labor!

En primer lugar quiero agradecer a Diaconía Madrid este reconocimiento, que en realidad es para el voluntariado de la Iglesia Cristo Vive, y a vuestro excelente trabajo durante la pandemia.

Soy voluntaria de Acción Social Cristo Vive hace ya 12 años.  Empecé con la entrega de juguetes y reparto de alimentos. Desde hace 5 años soy la responsable de la obra social. Cuento con un equipo de 25 personas voluntarias. Atendemos a  245 familias, con cerca de 800 usuarios.

El año 2020 ha sido un año excepcionalmente difícil, inesperado pero el amor del Señor ha brillado para toda persona necesitada, a través de muchos voluntarios dispuestos a arriesgar su propia salud,  en favor de tantas familias en exclusión social.

Hemos vivido fallecimientos de usuarios por la COVID, hoteles medicalizados, empleos perdidos, ERTE, ERE, etc. Pero lo que no ha cambiado a lo largo de este año es la esperanza de que el Señor tiene el control de cada situación. Su infinito amor nos hizo entender que teníamos que estar allí. Que era el mejor momento para acompañar, consolar, llevar alimentos a sus hogares, llamar a las familias, orar, vestir…

Gracias damos al Padre por las oportunidades que nos ha traído 2020. Seguimos avanzando porque servimos al Señor. Mateo 25:25-45

Mary Guerrero